sábado, octubre 28, 2006

POEMA

Sí, te quiero,
no es porque te lo digo:
es porque me lo digo y me lo dicen.
El decírtelo a tí, ¡que poco importa
a esa pura verdad que es un su fondo
quererte! Me lo dijo
y es como un despertar de un no decirlo,
y como un nacer desnudo,
el decirlo yo solo, sin designio
de que lo sepa nadie, tú siquiera.
Me lo dicen
el cielo y los papeles tan en blanco,
las músicas casuales que se encuentran
al abrir los secretos de la noche.
Si me miro en espejos,
no es mi faz lo que veo, es un querer.

1 comentario:

Dory dijo...

La sensación de querer. No la sensación de querer decirlo, de necesitar decirlo, sino la sensación del sentimiento. Y no hace falta decirlo, por que lo que te gusta es justo eso, sentir, mirar y sentir, oír y sentir, sin la necesidad de gritarlo a los cuatro vientos. En silencio, me gusta sentir que te quiero, aunque tú no lo oigas nunca, por que igual algún día llegues a saberlo, igual algún día leas en mis ojos.