viernes, junio 27, 2008

ESPAÑA GANA LA EUROCOPA

Bueno, aun no, ¿verdad?. Nos queda el último partido, pero quien duda de que PODEMOS!?

Igual hasta da mala suerte decir esto antes de tiempo, bah! Que más da! :D

El caso es que el grupo ha demostrado una afición enloquecida por el fútbol, algo nunca visto antes. Cuartos era el gran partido, ya que llevábamos 22 (¿sí verdad?) años sin ganar a Italia, y un número de años que desconozco sin ganar cuartos. Pues este año ganamos, matamos dos mitos de una vez. Y de que manera, con saltos, gritos, nervios, patatas y coca colas, camisetas rojas… lo nunca visto, adrenalina en su estado más puro.

Y una vez ganados cuartos, nos emplazamos en el mismo lugar y a la misma hora para ver si ganábamos la semifinal. Esta fue más tranquila, conseguimos desviar la atención hacia temas más… bueno, hacia otros temas que en esos momentos eran más interesantes. El caso es que, mira tú por donde, pues volvemos a ganar, mecaguento. Aunque esta vez con Rusia, que por lo que he oído, ya los habíamos ganado en los partidicos esos que se hacen al principio, los cuales por supuesto también tienes que tragarte, juegue España o no, aunque estos a solas.

El caso es que nos hemos vuelto a emplazar para el domingo, para la gran final, esa que ganamos seguro, ya veréis… Todos con camiseta roja (¿no? O amarilla, lo que sea) y a ver si la cosa termina en 90 min :D

Ahí va una foto de la victoria de cuartos.

viernes, junio 06, 2008

La relatividad

Pues tiene un problema la relatividad, que el punto desde el que se ven las cosas para cada uno es distinto. Y claro, de aquí surgen enfrentamientos, porque aquella casa yo la veo pequeñita, y tú esta casa la ves muy grande. Que luego igual me acerco y te digo que tienes razón, que es grande, o te alejas y dices que te parecía más grande desde cerca.

Aunque hay veces que no, que simplemente tienes esa visión, y es tu visión, y a ver quién te dice que no, que estás equivocado. Tu verdad, porque no hay verdad absoluta, todas son relativas. Y allá cada uno con la suya.

A mí me parece bien, porque ¿quién soy yo para desmontar a nadie su gran casa? Nada más lejos de mis intenciones. Eso sí, yo la seguiré viendo pequeñita y no le daré mucha importancia a la casa, ni a ella ni a su relativa grandeza.

Eso sí, que nadie se meta con mis manías relativas, o con mis actitudes relativas, que son mías, y si yo las hago así es porque así es como tiene que ser.

jueves, junio 05, 2008

El niño con el pijama de rayas

El último libro que he terminado ha sido “El niño con el pijama de rayas” de John Boyne. Ha sido uno de los libros sobre los que más se ha hablado últimamente, así que cuando empecé a leerlo esperaba encontrarme algo con fondo, algo que me hiciera pensar, del que sacara “chicha”. Y no ha sido así. Me ha parecido un libro totalmente plano, simple, escrito de una forma tonta y demasiado sencilla. Te muestra un niño irreal, con un coeficiente intelectual demasiado bajo para su edad. Da vueltas sobre el mismo tema, sin querer llegar a ningún sitio, con el propósito de llenar páginas. Lo único que se salva del libro es el final, que no voy a desvelar claro, pero toda la trama no va enfocada a ese final, son vueltas dadas sin sentido para rellenar. Es corto, así que si queréis leerlo, a pesar de mi opinión, podéis hacerlo. De hecho creo que soy de las pocas personas que opinan así, en general resulta un cuentito muy bonito con un final que impacta.